La pasarela como experiencia de consumo.
En este local de dimensiones reducidas, el principal desafío ha sido crear un ambiente que transmita amplitud y confort a los clientes, elevando la experiencia de consumo desde el primer momento. Para lograrlo, el diseño se basa en una composición simétrica que organiza y amplía visualmente el espacio. Una alfombra central de pavimento de madera actúa como el elemento conductor del local, dividiéndolo en dos alas y formando una “pasarela” que aporta dinamismo. Esta pasarela cumple una doble función: al entrar, dirige intuitivamente al cliente hacia el mostrador, y, al finalizar el servicio de estética, refuerza una sensación de empoderamiento y satisfacción.
El diseño contempla también un área más íntima para la zona de lavacabezas, donde se busca intensificar el confort y ofrecer un momento de relajación total. Este espacio más recogido permite que los clientes disfruten de una experiencia sensorial que aporta calma, contrastando con el movimiento del resto del local.
Para añadir coherencia visual, la nueva imagen de marca se ha integrado en todos los detalles. Las formas curvas, inspiradas en la identidad de la marca, están presentes en elementos arquitectónicos como los arcos de paso y los espejos. Estas geometrías suaves aportan armonía al ambiente y evocan una estética moderna y acogedora, que invita a los clientes a relajarse y disfrutar plenamente de su estancia.
Comercial
Interiorismo
Branding
Torrente – Valencia
39.50 m2
1995
2024
Arquitectura e interiorismo: RAAN arquitectura
Fotografía: Jorge Peiró
Branding: Pepe Castelló